sábado, 28 de marzo de 2009

El miito de la Quimera

La Quimera era, en realidad, un monstruo terrible con forma de león y cola de serpiente, que arrojaba fuego por la boca. Era un monstruo horrendo, hija de Tifón y de Equidna, que vagaba por las regiones de Asia Menor aterrorizando a las poblaciones y engullendo rebaños.Quimera fue derrotada finalmente por Belerofonte con la ayuda de Pegaso, el caballo alado, a las órdenes del rey Iobates de Licia.

La fiera asolaba los fértiles campos y devoraba personas y animales. Antes de emprender esta difícil tarea, Belerofonte consultó al adivino Poliedes, quien le aconsejó capturar al caballo alado Pegaso. Pegaso era querido por las musas del monte Helicón, ya que con un golpe con su pata había hecho brotar la fuente de agua Hipocrene de la tierra.

Belerofonte no encontró a Pegaso en el monte Helicón, sino en la fuente Pirene en la Acrópolis de Corinto. La diosa Atenea entregó a Belerofonte una brida de oro para domarlo, y que Belerofonte colocó sobre su cabeza.

Una vez armado se dirigió a confrontar al terrible monstruo. Protegido por la diosa Atenea, montó a Pegaso y volando sobre la Quimera, empieza a lanzarle dardos. Luego, introduce la punta de su lanza en las fauces de la Quimera, cuyo aliento de fuego funde la punta de plomo. Éste escurre por la garganta de la Quimera, quemando los órganos vitales y de esta manera Belerofonte logra vencerla.

No hay comentarios: